miércoles, 11 de febrero de 2009

Viaje a India - 11 de febrero

Las puertas del islam

Me levanté esa mañana en la casa de Anish. Él no estaba porque había pasado esa noche en la casa de su novia. Esa mañana Selda se había ido para Estambul, quedábamos solos con Diana. Esperé que llegara Anish a media mañana y a que me llamara Diana para ver qué hacíamos. Tomé un taxi y fui para el Main Bazar de nuevo. La noche anterior había llovido mucho y las calles del bazar estaban muy embarradas.


Me encontré con Diana y fuimos a tomar el metro para ir a las mezquitas. Delhi tiene varias, ya que fue invadida alrededor del siglo XIV por los islámicos, aproximadamente en la misma época en que invadieron la Península Ibérica. Cruzamos la estación de trenes, pasamos por algunos santuarios hinduistas y entramos al metro.


Primero fuimos al Gandhi Smriti, la casa en la que vivió sus últimos días y donde fue asesinado. Hicieron de ella un enorme monumento histórico que me gustó mucho. Su habitación es un sitio muy especial. Y en el jardín también se respira un aire particular.





Después fuimos a Nizamuddin’s dargar, y visitamos una mesquita. Los musulmanes parecen bastante simpáticos y me sorprendieron por lo receptivos a la hora de ver un extranjero, claramente no islámico, curioso, sacando fotos. Se lo tomaban con mucho humor y hasta posaban.





Estaba atardeciendo y no queríamos perder tiempo. Tomamos un auto y fuimos a recorrer lo que quedaba de la zona. Primero entramos a Humayun’s Tomb, una impresionante tumba dedicada a uno de los grandes emperadores mongoles (que se dice que inspiró la arquitectura del Taj Mahal). El sol caía atrás del parque que rodea ese monumento y un grupo de chicos jugaban al fútbol con la última luz del día. Me hubiera quedado un buen rato contemplando esa escena, pero el taxi estaba esperándonos.



Continuamos el viaje hasta el Indian Gate, construida por los ingleses, a comienzos del siglo XX, sobre la avenida Rajpath (Camino de los Reyes). Este es un monumento de conmemoración a los soldados indios que murieron en la Primera Guerra Mundial y las Guerras Afganas de 1919. Le pedimos al taxista que nos dejara en Connaught Place, cenamos y reservamos los pasajes de tren para salir, al día siguiente, hacia el Taj Mahal.